viernes, enero 28, 2011

Las apuestas del estado.

En toda apuesta, en todo juego, quien la propone intenta que la misma sea atractiva, es necesario hacer creer a la gente que se hará millonaria para que juegue a la primitiva y que la posibilidad de poder recibir el premio compense la seguridad de perder lo apostado.

El objetivo de todo juego es ganar, y no me refiero para el que juega, sino para el que lo propone. Si todos los números de la lotería los comprase una sola persona, se aseguraría de recibir todos los premios, pero perdería hasta un 50% del dinero invertido. El hecho de que no lo compre una única persona no cambia el panorama, los premios siguen siendo los mismos y el único que gana es aquel que recibe hasta un 50% o más de lo que todos los demás invierten. Si hay más acertantes, el premio está más repartido, pero el beneficio producido al que promueve el juego permanece inalterable.

Lotería nacional, bonoloto, primitiva, quiniela, euromillón, el gordo y vete a saber cuantos más desde el ámbito público así como el sorteo de la cruz roja, la once o las máquinas tragaperras de los bares, desde el privado son los ejemplos más evidentes de estas apuestas en las que el único objetivo es recaudar dinero a costa de la opción, por parte de los jugadores, de ser uno de los agraciados con el premio.

Más no son  las únicas apuestas a las que jugamos. Las pólizas de seguros son, a todos los efectos, otro juego en el que las compañías de seguros apuestan a que ganarán más dinero con nuestras pólizas del que perderán por los incidentes declarados. Uno puede pensar que cuentan con la voluntad de la gente de no tener que utilizar dichas pólizas, en parte porque cada parte se corresponde con una subida correspondiente de la póliza. Pero la prueba más evidente de que se trata de un juego se da en las pólizas de deceso, esas que se suscriben para cubrir los gastos de sepelio. Vamos a ver... las compañías aseguran a la gente para cubrir un parte que se va a dar inevitablemente... si todos van a morir, si todos van a ejecutar la póliza, ¿como es que la compañía de seguros puede considerar rentable dicha póliza?

El secreto estriba en que la apuesta de la compañía de seguros está en que están seguros, por pura estadística, de que pagarás más durante los años que vivas, que lo que al final tendrán que pagar por ejecutar la póliza. Vamos... que habría sido mucho más rentable ir metiendo el importe del seguro en una cuenta bancaria que a fin de cuentas también iba a producir un beneficio al banco que la posee, que pagar a la compañía de seguros.

Esto desde el ambito privado, pero en el público tenemos la misma apuesta con la jubilación. La contribución a la jubilación de cada persona no deja de ser una apuesta que realiza el estado con los contribuyentes a que se morirán antes de poder cobrar por lo cotizado.

Es un hecho que la espectativa de vida se ha ido ampliando durante las últimas décadas, no así la edad de jubilación, provocado sobre todo por cuestiones electorales, pero en origen, la edad de jubilación se correspondía con aquella que calculaban como más probable de fallecimiento o inutilidad para el trabajo.

Ahora vuelven a modificar dicha edad demostrando que el objetivo no es el de vivir mejor, ni tan siquiera el de trabajar más, sino el de cotizar más y cobrar menos. Curioso me resulta que anuncien en el Pais que aquellos que hayan cotizado durante 38 años y medio puedan retirarse a la edad de 65. Esto quiere decir que tienes que haber estado trabajando ininterrumpidamente desde los 26 y medio para poder retirarte a esa edad. ¿cuantos años tiene un medico cuando encuentra su primer trabajo?, ¿cuantos tiene cualquier universitario?, ¿cuantos años tiene la gente de media cuando encuentra actualmente su primer trabajo?, y este no será el único, así que de media, se nos juntará la edad de jubilación con la de deceso. Si los seguros ganan con ello... habrá alguien que con la jubilación a los 67, no sabría decir quien, tambíén.

Hace poco leí un chiste en el que la abuela, ya jubilada,  le decía a la nieta: a tu edad yo ya llevaba 10 años trabajando y la nieta le decía a la abuela... yo a la tuya... me quedarán 10 para jubilarme.

2 comentarios:

Anabel dijo...

que yo pienso amortizar esos dos años más! voy a vivir muchisimos más!
Qué te apuestas?

;-)

Outsider dijo...

Lo tomes como lo tomes, si existe tal cosa como disfrutar de la jubilación, serán dos años menos disfrutando de ella... con toda seguridad, los dos en los que en mejor condiciones ibas a estar.