sábado, diciembre 29, 2007

Los dientes de la Seguridad Social

Lo plantearía como una petición pero para el caso que me iban a hacer...

El caso es que me ha surgido una duda al respecto de lo que cubre o deja de cubrir la sanidad pública.

Por el parecer, como las competencias en materia de sanidad están transferidas a las comunidades autónomas se dan situaciones curiosas en lo que a cobertura sanitaria se refiere. De hecho si tenemos presente que los mayores salarios se reciben en ciudades como Madrid, (no tenemos en cuenta que vivir en Madrid tambien es mucho más caro) pues resulta que en Andalucía la operación de cambio de sexo está cubierta por el sistema general de salud mientras que en Madrid no. (algo un tanto curioso siendo que los gastos de salud de Andalucía son superiores a sus ingresos por el mismo motivo y que por tanto es ese ciudadano de Madrid que no puede optar al mismo privilegio el que está pagando el que un Andaluz pueda gozar del mismo.

Pero no quería entrar en la idoneidad o no de dar ese servicio "sanitario", mi duda entra cuando me pongo a pensar en aquellas prestaciones sanitarias que no están cubiertas en ninguna comunidad.

Hay enfermedades raras que no tienen cobertura sanitaria y cuyos costes sufragan en gran medida, sino en toda, sus familiares y amigos, sin embargo en muchos casos se trata de enfermedades mortales... pero claro, la relación precio - beneficio electoral obtenido, no compensa la inversión.

Hay servicios que no están cubiertos porque se duda de su eficacia: Homeopatía, reflesoterapia, quiropractica, acupuntura, etc. No soy científico ni he estudiado su efectividad por lo que lo vamos a dejar en que si dicen que no funciona... será que no funcionan. (Por experiencia propia... hasta ahora, lo que he probado... no me ha funcionado).

Pero hay muchos otros que si están cubiertos por su evidente mejora de la calidad de vida y número de afectados como para constituir un problema de salud. Por ejemplo, si te rompes un pié te lo reparan y si hace falta poner una protesis o una placa en un hueso pues tambien está cubierto. Claro... si no puedes caminar, no puedes trabajar... y no cotizas. Si tienes una infección vírica, se combaten sus efectos y si un accidente te deforma la cara, te la reparan... no es que la dejen como estaba pero al menos recupera su funcionalidad y no lo dejan en huesos.

Pero... si las bacterias están relacionadas con la caries, el único tratamiento contemplado es la extracción. Si cada vez que te rompes un dedo, la única opción fuera la de cortar el dedo igual protestabamos...

Y aquí es donde empiezo a no entender el sistema. Me comentan que los tratamientos dentales son sumamente caros... (supongo que no será más caro un empaste que un transplante de corazón...) y que el problema es que afectan a mucha gente... como la gripe y los dolores de cabeza.

Pero... ¿porqué son tan caros? Lo que es caro es ir a un médico privado... sea el que sea y los materiales... no se, creo que es la menor de las partidas de la factura de un dentista.

Pero la universidad "pública" sigue produciendo dentistas que no podrán trabajar en la sanidad pública... ¿quiere ello decir que podríamos introducir los estudios de acupuntura como enseñanza reglada?

No entiendo las causas, solo se que nos hemos acostumbrado y que nos parece tan normal pagar al dentista como le parece a los abuelos de Castrillo el pagar la "iguala" al médico de la seguridad Social para que les atienda.

Sin embargo creo que las enfermedades dentales y sus tratamientos (empastes, coronas, periodoncias y ortodoncias) deberían estar cubiertos por la sanidad pública y al tiempo emplear a más dentistas en los ambulatorios... y a quien lo hiciera, hasta es posible que recibiera más votos.

jueves, diciembre 27, 2007

Fecha de caducidad del matrimonio

En este artículo acabé diciendo: “otro día expondré formas de fracasar en un matrimonio, o de averiguar si se ha fracasado en el mismo sin haberse dado cuenta antes.”

Recientemente he descubierto una nueva forma de fracasar en el matrimonio... casándose. Siempre había escuchado de gente que había vivido en armonía durante un número indeterminado de años, más bien tirando a muchos, y que un día deciden que ya ha llegado el momento en el que normalizar la situación y se casan para adquirir la normalidad... es decir, para poder fracasar en el matrimonio como tantos otros.

Claro que la pregunta que habría que hacerse en estos casos es obvia... ¿y por qué decidieron casarse? Supongo que hay muchas razones por las cuales cometer ese “error” pero a mi se me antoja que la razón es la misma que induce a muchas parejas a tener un hijo para salvar el matrimonio. Después de mucho tiempo de convivencia se llega a la conclusión de que hay algo que falta y se llega a la conclusión de que lo que falta es un trámite burocrático que lo único que conlleva es un gasto económico y generar una serie de papeles que una vez se ha formalizado el contrato les dejan en la misma situación en la que estaban antes de iniciar el procedimiento. Claro que en ese momento se dan cuenta de que no era eso lo que les faltaba...

Hace un tiempo salió a la luz la noticia de una senadora alemana que proponía la fecha de caducidad al matrimonio y la posibilidad de renovarlo... o no, cada siete años. Supongo que el número se debía a algún tipo de estadística y no estaba simplemente exportado de los siete años de buena suerte que preceden a los de mala suerte (o viceversa).

Lo cierto es que el matrimonio, el enamoramiento, la felicidad en pareja tiene fecha de caducidad desde el momento en el que es imposible evaluar todas las opciones que existen para escoger la pieza que mejor encaja. Si solo hemos encajado unas pocas piezas del puzzle de lo que va a ser nuestra vida, es muy fácil que tarde o temprano descubramos que la pieza a la que nos habíamos unido no era la que mejor encajaba. En ese momento podemos optar por varias opciones, dejar de montar el puzzle y pasar absolutamente de todo sería la más dramática pero en realidad es la más común. A fin de cuentas es fácil ponerse a contar las innumerables veces que empezamos algo que no acertamos a acabar: una carrera, un sueño, un viaje, un crucigrama o un puzzle. También se puede seguir montando el puzzle pero a sabiendas de que habrán unas cuantas piezas que no encajan pero la única opción valiente es la de desencajar la pieza que no encaja y buscar la pieza que falta. Igual nos empeñamos en buscar otra pareja que ocupe ese lugar pero es fácil volver a encontrarse con el mismo problema, si no probamos todas las piezas seguimos sin saber cual es la que mejor encaja.

No se si ha prosperado la opción alemana, creo que escandalizó a la iglesia y a los puritanos de turno, claro, para éstos es fácil creer que esa situación a la que se someten es un martirio que les garantiza una vida mejor después de la vida... pero para el resto, para aquellos que lo único que creen de la Biblia es aquella cita que dice que del polvo venimos y en polvo nos convertimos (puestos a interpretar esta es la interpretación que más me gusta) la opción del martirio no parece demasiado convincente así que si el contrato fuera revisable a lo mejor el mercado de piezas de puzzle sería algo más abundante y las posibilidades de encontrar nuestra pieza ideal sería algo más elevada y en cualquier caso creo que veríamos menos parejas infelices.

domingo, diciembre 23, 2007

Shout (Tears for fears)

Creo que aún no he puesto nada de Tears for fears, Ahhhhhrr, esto se encuchaba en Flamingos cuando empezamos a ir a la disco... ¿2º de bup? Eran tiempos de grandes dosis de testosterona desperdiciada...

sábado, diciembre 22, 2007

Girls Just Wanna have fun (Cindy Lauper)

Hoy toca recordar la facultad. No recuerdo donde escuché por primera vez esta canción pero se a quien me recuerda y bueno... en realidad es un triste recuerdo para lo alegre que es la canción.